Medicina Equina
Recomiendo leer: Entrenado al hueso- parte 1
La intensidad debe exceder a los picos normales de fuerza de las actividades diarias. Sin embargo, las cargas excesivas pueden romper la resistencia del hueso y producir fracturas. En la práctica se recomienda ejercitarse progresivamente, valorando la respuesta individual, hasta el máximo tolerable de carga y de tiempo.
El hueso puede duplicar o triplicar su corteza y ajustar su longitud para neutralizar las demandas a que es sometido.
- FISIOLOGIA EN LA FORMACION OSEA ESTIMULADA POR EL EJERCICIO
Existen básicamente dos poblaciones celulares que aumentan o
disminuyen el tamaño del esqueleto y lo remodelan para soportar mejor el
ejercicio.
El Ejercicio >>>>>>> Células de revestimiento óseo >>>>>>> Osteoblastos
El ejercicio estimula las células de revestimiento óseo que
sintetizan un precursor óseo llamado osteoide que mantiene la matriz de
colágeno del hueso, y estos los osteoblastos.
- Los osteoblastos excretan el componente mineral cristalino Hidroxiapatita Ca10 (PO4)6 (OH)2 que se deposita en la matriz osteoide y se mineraliza formándose los Osteocitos.
- La formación o disolución de hueso depende del calcio en el organismo, en caso de ingesta insuficiente hay disolución del hueso. Es importante suministrar calcio en la dieta
- La inflamación en un área del hueso lo desmineraliza por disminución del PH en el área, causando pérdida de cristalino Hidroxiapatita.
Osteoclastos: son
la rama destructiva del sistema de remodelado óseo. Estos emiten ácido
desmineralizando y luego digieren el colágeno remanente.
Ante una carga biomecánica los osteocitos dirigen la remodelación ósea
estimulando a los osteoblastos para la formación de hueso o estimulando a los
osteoclastos para la desmineralización.
- TIPO DE EJERCICIO
El “arte” del entrenamiento consiste el llevar a que el
hueso genere nuevo hueso (hipertrofia) sin que esto genere lesión permanente.
“Ley de Wolft” dice: el hueso se deposita cuando se necesita
fuerza, y es removido cuando la fuerza es innecesaria. (Dicho hace 100 años).
El ejercicio agrega masa ósea para resistir cargas y cambios
de forma.
El hueso a diferencia del resto de los tejidos responde según la intensidad y no el volumen del
mismo.
Alterando distintos aires (trote, galope y otros) y
distintos pisos se modifican las cargas al hueso y esto permite lesiones no
acumulativas; generando mayor trabajo y menor daño.
Un entrenamiento largo y monótono (igual aire y piso) generan más daño.
Los ejercicios de fuerza y alto impacto, como los
saltos, proporcionaron mayores efectos, tanto sobre el desarrollo de la masa
ósea como de la muscular.
La inmovilización produce una rápida perdida de masa mineral esquéletica.
El ejercicio genera nuevo hueso en los sitios de compresión y no en los sitios tensión.
El caballo es un animal de pastoreo y lo
transformamos en un animal estabulado que disminuye el estímulo al hueso.
La inmovilización produce una rápida perdida de masa mineral esquéletica.
- TENSION Y COMPRESIÓN
El ejercicio genera nuevo hueso en los sitios de compresión y no en los sitios tensión.
Las fuerzas de tensión dadas por elongación
de los ligamentos y tendones generan fuerza tensiles.
El stress por compresión genera fracturas.
Las fracturas se dan más en el hueso “viejo”
por ser menos elástico y van hacia la superficie (hueso nuevo) según la
gravedad de la fractura.
El caballo es un animal de pastoreo y lo
transformamos en un animal estabulado que disminuye el estímulo al hueso.
Las
herraduras con agarradera frenan el deslizamiento
que genera el impacto, aumenta el hundimiento en el piso, genera hiperextensión
del nudo, sobrecarga del ligamento suspensorio y región palmar/plantar del nudo
generando daño en esta articulación (caña/sesamoideo).
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